¿JUEGAS?
Hoy te
propongo un juego, "hacer limpieza", pero no de tu casa, ni de tu
coche, ni de tu cajón, ni de tu ropero, ni de tu escritorio.
Se trata de
limpiarnos el uno al otro, quitar las huellas que el pasado ha dejado en
nosotros, también los besos traviesos de aventuras que no resultaron y las
cicatrices que aún no han cerrado, enjabonar la piel, enjuagarla hasta dejarla
suave, lista para recibir la nueva ronda de besos húmedos.
Hay que
dejar al corazón limpio y darle un masaje con aceite de confianza, purificar el
amor que tenemos dentro, a las piernas ponerles crema con aroma a deseo, las
manos enjuagarlas con agua de rosas, para que dejen huella con aroma a tentación,
el pecho debe lavarse con mucha agua para que corra libre por los lugares
prohibidos.
Una vez que
ya estemos limpios, entonces te pediré tu desnudez, la cual deseo conocer
contemplar y acariciar, tu sombra a la cual celo porque siempre está a tu lado,
el cabello alborotado con olor princesa, los lunares que despiertan mi deseo,
la constelación de tu cara, los besos que tanto he soñado, tu saliva, los
temblores de orgasmo, las contracciones, tu sudor, los gemidos, la respiración
acelerada, la taquicardia y la majestuosidad de tu rostro, pechos y
entrepierna.
Por mi parte
yo te ofrezco todas las ilusiones y sueños que tengo en la vida, mi cuerpo, mi
alma, toda mi mente y mis ganas de vivir.
Lo más
valioso que puedo ofrecerte es hacer del tú y yo un nosotros, sin miedos, sin
paradigmas, sin importar nada más.
¿estas
dispuesta a arriesgar el todo por el todo?
Cava.