ABANDONO.

A veces no me doy cuenta de que me he ido hasta que vuelvo.

 

Para irse no hace falta abrir la puerta, ni bajar las escaleras, ni siquiera moverse del sofá.

 

Se queda uno quieto, con la mirada perdida en cualquier sitio y desaparece.

 

Hubo noches en las que tuve que abrazarme fuerte, días en los que tuve que aconsejarme en lugares solos o frente al espejo, lagrimas que yo mismo me limpié.

 

De esto aprendí que puede abandonarme todo el mundo, pero mientras yo no me abandone seguimos contra todo y contra todos.

 

ACEPTACIÓN.

Cuando nos miramos en el espejo con honestidad y aprendemos a aceptarnos por lo que realmente somos, ocurre algo profundo: la necesidad de buscar validación externa o de ejercer poder sobre los demás comienza a desaparecer.

 

Esta intimidad con quienes realmente somos fortalece nuestra base interior, nos devuelve la seguridad que a veces buscamos fuera de nosotros mismos.

 

La autoaceptación es un acto de coraje, una decisión de no ser tu propio enemigo, no luchar batallas internas innecesarias.

 

Es abrazar lo que somos, con todas las imperfecciones y singularidad, y decir: "Yo soy suficiente.

 

 "Porque, al final, el mayor desafío en la vida no es ser perfecto, sino amar quién eres con bondad.

 

 Y justo después, viene el segundo desafío: ser feliz con lo que tienes, viviendo con un corazón lleno de gratitud.

 

A medida que maduramos, aprendemos a vernos con una visión más realista, sin las ilusiones que antes nos cegaban.

 

Aceptamos más, sufrimos menos entendemos más, desesperamos menos. Amamos más, pero suavemente, sin exigir que la vida u otros nos llenen.

 

Y cuando finalmente aceptamos lo que somos, con todo lo bueno que hay y todo lo que aún hay que trabajar, algo mágico sucede: nos volvemos más aceptando a los demás.

 

Aceptarse a uno mismo es el primer acto de amor que abre la puerta a una convivencia más ligera, genuina y empática. Después de todo, la aceptación comienza dentro de nosotros, pero se hace eco del mundo.

 

A VECES BIEN.

A veces todo va bien, a veces no.

 

A veces mi corazón necesita tiempo para aceptar lo que mi mente sabe y a veces mi mente necesita tiempo para aceptar lo que mi corazón siente.

 

A veces sonrío a veces lloro.

 

A veces necesito mucho y a veces no necesito nada.

 

A veces me arriesgo y a veces me da miedo.

 

Y está bien, porque aunque a veces el camino se hace difícil, siempre sigo aquí, conmigo.

 

A TI.

                                              A ti, que entraste a mi vida sin darme cuenta.

 

A ti, que me regalas el placer de recordar un beso apasionado.

 

A ti, que provocas deseos en mi con solo recordar el sabor de tus labios.

 

A ti, que eres la imagen de la atracción sin convertirse en amor.

 

A ti, que me permites acariciar tu rostro mientras mi mente piensa: ¿en qué momento sucedió todo esto?

 

A ti, que despiertas mis más profundos deseos con el delicioso olor de tu piel.

 

A ti, que sin pertenecerme te he sentido tan mía por solo algunos justos momentos.

 

A ti, tendría tanto que decirte, pero hoy solo te digo gracias por haberme regalado esos momentos que me hacen recordar el hombre que soy.

 

SOLO AMIGOS.

 

¿Como hago para no quererte, si me encantas?

 

Como hago para no seguir engañándome, pensando en que no debo ni quiero besarte si, si quiero besarte.

 

No quiero arrepentirme de no haber probado tus labios de miel, saber que se siente besar a una princesa de ojos de cielo con luna incluidos.

 

Ya no sé qué más mentiras decirle al corazón para calmar el deseo, no sé qué hacer para que deje de latir tan fuerte cuando menciono tu nombre, te quiero, te adoro por lo que eres, por tu dulzura, por cuidarme tanto y no querer hacerme daño.

 

Y tienes razón al hacerlo tanto por mi como por ti, pero más daño siento al verte y tener que voltear la mirada para no derretirme con tu sonrisa de ángel y tu mirada pícara,  pero a pesar de todo esto acepto tu decisión de ser solo amigos, aunque esto me mate por dentro.

 

CAVA.

A VECES.

A veces hay que voltear hacia atrás para darte cuenta de todo lo que evolucionaste, aprendiste, creciste, superaste, cambiaste, te moviste, lloraste y sufriste.

 

Aplaude lo valiente que eres por seguir en el intento de ser mejor persona cada día, de seguir en el proceso de sanar, de seguir evolucionado y aprendiendo de la vida que nos da tanto

 

Abraza y aplaude siempre tus logros que mucho trabajo te han costado.

 

SEXO Y DESEO.

 

Que frase tan acertada me dijo una amiga, la frase es de Neruda, y no la había leído antes, pero vivo bajo esa premisa: Las pasiones y el deseo nos mueven y nos hacen hacer cosas, cosas que no haríamos normalmente a no ser por dichas pasiones.

Se imaginan una vida sin pasiones, sin emociones, sin deseos, es por eso que el sexo mueve al mundo, si se dan cuenta toda gira alrededor de él, la ropa, los perfumes, la comida, los afrodisiacos, la publicidad, todo con el fin de hacernos cada vez más atractivos para atraer a los seres que nos interesan.

Comemos con los ojos, siempre lo he dicho, pero digerimos con el corazón que es el que al final dicta si esa persona que nos pareció tan atractiva al principio seguirá siendo atractiva por mucho tiempo.

Soy adorador de las pasiones y de las emociones, por eso me encanta conocer gente nueva y vivir experiencias con cada una de ellas.

Me aburre sentir lo mismo siempre y por eso tomo los riesgos que tomo, por ejemplo: El hecho de escribir estas letras, me apasiona saber que me leen y que hay personas que comparten mis pensamientos.

Vivan las pasiones.

Cava.

COQUETEO.

 

Hoy quiero recordar todas las cosas bellas que nos hacen las mujeres al momento de coquetearnos y que muchas veces (hombres al fin) no nos damos cuenta.

Esa mirada con los ojos medio cerrados, esa sonrisa bajando la mirada, tocarse el cabello y moverlo de un lado a otro, el cruzar la mirada y la forma de expresarse (movimientos corporales) que solo ellas saben hacer.

Todo eso forma parte de un conjunto exótico y encantador de señas que además de encantarme me intrigan por lo variado de los repertorios que tiene cada mujer.

Y es que saben sacarle provecho a sus mejores cualidades, por ejemplo la que tiene unos pechos preciosos, seguramente te mostrará su escote, la que tiene los ojos bellos se los maquillará para que resalten en su rostro, la que tiene asentaderas preciosas, seguramente se pondrá pantalones ajustados como para que disfrutes de su figura y la infaltable falda para que puedas apreciar sus torneadas piernas.

Definitivamente, las mujeres nos llevan una gran ventaja en esto del coqueteo inteligente, mi agradecimiento para ustedes que me hacen estar orgulloso de ser hombre, solo para poder disfrutar de sus "señas".

 

Cava.

TU LIBRO.

                 ¿Les ha pasado que extrañan más las cosas que no pueden tener?

Es decir, lo que más quieres es lo que más añoras siempre, si eres diabético, quieres comer azúcar, si tienes que hacer dieta entonces quieres comer todas las comidas que no te deja comer esa dieta, si te dicen no beses, entonces mueres por besar.

Nos encanta lo prohibido, o por lo menos a mí me emociona hacer lo que no debo con tal de generar placer.

Este hecho va a acabar con mi vida un día de estos, pero lo hago con tal de tener una vida llena de recuerdos emocionantes, quiero contar mi historia algún día y que las personas que la escuchan pidan más y más detalles y capítulos.

Las aventuras de CAVA, que hasta ahora me han llenado de un placer indescriptible, el poder influir en la vida de tantas personas de una u otra manera es super especial, no me arrepiento de nada de lo que he hecho hasta el momento.

Guardo todos los recuerdos en mi libro, donde día a día se escriben mis aventuras, y es un tesoro muy valioso, tan valioso como tú.

Tú también escribe tu libro y así el día de mañana podremos compartir esas experiencias que han marcado nuestras vidas.

 

Cava.

 

EL BRA Y YO.

 

Si le preguntamos a cualquier hombre por supuesto que lo va a negar, pero ustedes mujeres y yo sabemos que esto les ha pasado a todos y cada uno de los hombres de este mundo, yo aun lo recuerdo como el acto más embarazoso de mi vida, pero al mismo tiempo como algo lindo, en fin gajes del oficio o no...?

Imaginemos la escena: Estoy con una mujer, me gusta, le gusto, quizás hasta nos amamos, aunque en la pubertad quien sabe lo que es amar realmente, el punto es que estamos en un momento muy, muy candente, el lugar es lo de menos, (mi sala, su sala, mi cuarto, su cuarto, el coche etc.), me la estoy comiendo a besos, su blusa en el suelo, mis manos acarician su espalda y juegan con su cabello, en ese justo momento me percato que solo me falta algo lo más sencillo quitarle el BRA.

Entre beso y beso, caricia y caricia, uno mira de reojo el dichoso BRA y en ese momento piensas caray como se quita esta cosa y ahí empieza la pelea, una pelea entre él bra y yo y en medio de esta pelea ella la mujer.

La pelea es dura, una pelea cuerpo a cuerpo, lo estiro y no pasa nada, lo intento romper y me es imposible, lo subo y poink una bub sale por debajo, pero la otra está atrapada, ahora lo bajo y poink la bub atrapada a quedado libre pero ahora la otra está atrapada y mientras continuo en medio de esta pelea, ella la mujer, utilizando solo dos dedos, el índice y el pulgar (track) lo ha desabrochado en menos de un segundo.

Carajo porque nadie me dijo que solo era un track por delante y ya, está bien perdí, pero siempre me entregué en la cancha ¿o, no?

 

Cava.